Es mi primer año en este colegio, y mientras preparaba el aula para dar la bienvenida a mi grupo se me ocurrió una actividad que iba a resultar un tanto "inesperada" y que serviría para anticiparles lo que íbamos a trabajar durante los siguientes cursos escolares.
En este sentido, busqué una frase que pegaría en sus mesas y posteriormente haría un montón desordenando todas las mesas y les pediría que organizaran el aula buscando el sentido de dicha oración. Además, cada alumno tenía en su pupitre un lápiz con su nombre y una frase motivadora, para comenzar el curso con buen pie.
Finalmente, una vez colocados los pupitres y las palabras, se leerá y comentará en clase.
Quedó expuesta a la entrada del aula. Los resultados, fueron los siguientes:
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